“Necesitamos subvertir la vieja realidad y construir un presente con vidas habitables”
“Necesitamos subvertir la vieja realidad y construir un presente con vidas habitables”
Surt ha organizado un diálogo para reflexionar sobre la reconstrucción social que requiere la crisis desencadenada por la Covid-19 de forma que los trabajos de cuidados sean situados en el centro.
Han participado Rocío Echeverría, trabajadora del hogar y activista de Sindillar, Ana Teresa Vélez, integrante de la concejalía colectiva del movimiento político de mujeres de Medellín Estamos listas, Marta Nieto, codirectora de la Muestra de Films de Mujeres, y Fina Rubio, antropóloga y presidenta de Surt.
En el encuentro virtual, Rubio ha planteado el momento actual como un pulso, en el que “por un lado, los grandes poderes intentarán que volvemos a la vieja normalidad, mientras que al extremo opuesto hay la voluntad de sectores sociales cada vez más amplios de evidenciar la anormalidad económica de que venimos y la necesidad vital, porque nos va la vida en ello, de subvertir aquella vieja realidad y construir un presente y un futuro de vidas habitables, que merezcan la pena ser vividas”.
“Los trabajos en torno al cuidado son los más precaritzados, los que más están sufriendo la pandemia, y es donde más estamos las mujeres, porque cuidar es una función que se nos ha impuesto como ‘natural’, cuando tendría que ser desde la libertad, no desde la imposición y el empobrecimiento que genera asumir el cuidado de criaturas y personas mayores”, ha planteado Vélez.
“Manifiestos, informes, propuestas… hace años que se hacen y es necesario políticas públicas con cambios profundos, como es la derogación de la ley de extranjería, que hasta ahora nos somete a un nicho de trabajo muy precario, como es el trabajo del hogar y los cuidados en régimen de internas, con la esperanza de conseguir regularizar los papeles”, ha puesto sobre la mesa Echeverría.
Durante el diálogo, se ha proyectado el corto documental ‘Organizar lo (im)posible’, dirigido por Carme Gomila y Tonina Matamalas, que relata la lucha laboral de Las Kellys, las trabajadoras de la limpieza de los hoteles. “El mensaje es muy claro: la vida no funcionaría sin las tareas reproductivas, sin los trabajos que se ponen al servicio de sostenerla”, ha planteado Nieto, para quien “este planteamiento tiene que ser un centro de actuación y de preocupación de las mujeres en el audiovisual”.
Podéis recuperar el diálogo: