«La gente no es consciente aun del abanico de oportunidades de la economía social y solidaria»
«La gente no es consciente aun del abanico de oportunidades de la economía social y solidaria»
Ana Lucía Olivos, técnica del Punto de Acogida y Orientación del InnoBA de Barcelona Activa, comparte una mirada sobre este servicio orientado a promover y fortalecer los proyectos de innovación socioeconómica en la ciudad. Desde que abrió las puertas, ofrece actividades, servicios especializados, formación y espacios de experimentación e incubación, en el ámbito de la economía social y solidaria (ESS) y la innovación socioeconómica, tanto a aquellas personas y organizaciones que quieren tener un primer contacto con ella como a las que ya tienen proyectos en marcha.
¿Qué aporta InnoBA a las personas que quieren emprender en el marco de la economía social y solidaria?
La idea del Innoba es, sobre todo, ofrecer actividades relacionas con la economía social y solidaria y la innovación socioeconómica, por un lado, a través del Punto de Acogida y Orientación, y por otro, a través de la CoAgenda, una agenda colaborativa para visibilitzar las entidades que trabajan en la economía social y solidaria y recoger las informaciones de este ámbito. En el Innoba también hay la InnoBAdora, un espacio para promover la colaboración entre varios proyectos de innovación socioeconómica y de la economía social y solidaria. Y, además, el espacio autoconsulta actúa de biblioteca, con material bibliográfico, digital, prensa y revistas especializadas que pueden ser útiles e interesantes a las personas que se plantean emprender o que ya tienen su proyecto en marcha.
¿Qué suelen pediros las personas que se dirigen al InnoBA? ¿Qué necesidades principales detectáis entre la gente que quiere emprender en el marco de la economía social y solidaria?
Una de las cosas que más necesitan son ayudas económicas, fuentes de financiación. También suelen pedir asesoramiento porque son personas que vienen con una idea, quieren constituir una cooperativa o una asociación, pero no conocen los pasos a seguir. Aquí las asesoramos sobre los recursos que tenemos en la ciudad y hacemos las derivaciones cuando hace falta.
¿Suele ser un perfil muy determinado de persona, la que se plantea emprender dentro de la economía social y solidaria?
Las personas que se nos dirigen son diversas, también con diversidad de origens. Pero sí que es cierto que si hay programas específicos, por ejemplo el Construimos en femenino las otras economías, dirigido a mujeres, es porque a menudo necesitamos un empujón para sacar adelante estas iniciativas.
¿Creéis que en un contexto de crisis económica y social aumentarán las personas que apuesten por impulsar su proyecto dentro de la economía social y solidaria o al contrario, que se frenarán las iniciativas?
Con el confinamiento notamos una caída de las consultas y las que llegaban tenían que ver con la búsqueda de financiación o a raíz de encontrarse en situaciones de tener que cerrar. El escenario de las últimas semanas ha sido muy activo porque muchas personas se han interesado por presentarse a dos subvenciones: Fortalecemos la economía social e Impulsamos. Se han reactivado gracias a encontrar esta oportunidad económica.
¿Creéis que lo que implica y significa la economía social y solidaria es desconocido por buena parte de la población, a pesar de que en los últimos años haya ganado visibilidad?
La gente no es consciente todavía del abanico de oportunidades de la economía social y solidaria. En este sentido, la CoAgenda nos tiene que ayudar. Incluso hay muchas entidades que son parte de la economía social y solidaria que no conocen este recurso de difusión gratuito para mostrar lo que están haciendo. Tenemos que trabajar para que más personas y entidades se acerquen y la CoAgenda es un recurso que puede dar un empujón de visibilitzación a pequeñas necesarias iniciativas.