Módulo 1: Equidad de género
Diferencias sexuales, desigualdades sociales
El género en la escuela
“Es claro que la desigualdad es una variable transversal que afecta homogéneamente a todos los estratos sociales en que las mujeres y el resto de grupos discriminados se sitúa; el patriarcalismo no es una estructura de opresión autónoma, concentrado en las relaciones de subordinación de las mujeres a los hombres, sino un conjunto indiferenciado de opresiones, de sexo, raza, género, etnia y condición social. (...) Por esta razón, el Comité recalcó la necesidad de que los Estados eliminen las actitudes y estereotipos discriminatorios, así como las costumbres y prácticas persistentes de las tradiciones que han puesto a las mujeres en posiciones inferiores.”(25)
La discriminación de género en la educación se da también una vez adentro del sistema educativo y afecta muy en particular a las mujeres pero también a los varones, estando además relacionada con otras variables, como la pertenencia étnica, religiosa, social o la orientación sexual.
Es así importante considerar como se construye en la escuela las identidades femeninas y masculinas, como se integra o no las cuestiones de género en el currículo escolar y en los currículos ocultos.(26)
“Los problemas relacionados con la escolarización de las niñas no se encuentran desligados del contenido de la educación. Por el contrario, los estereotipos de género, las amenazas a la seguridad emocional de las niñas y el currículo insensible a las cuestiones de género conspiran directamente contra la realización del derecho a la educación”.(27)
La promoción (o no) de una equidad de género puede ser observada en las relaciones interpersonales entre estudiantes, entre éstos y éstas y los y las docentes, y en las políticas educativas. Algunos problemas y estereotipos a nivel mundial, identificados por el Relator Espacial de Naciones Unidas (FNUAP)(28) sobre las cuestiones de género en la escuela, son los siguientes:
- Bajas expectativas de los maestros y maestras, relacionadas con las habilidades intelectuales, ya que se cree que las niñas son inherentemente menos inteligentes que los niños.
- Los maestros y maestras ofrecen menor retroalimentación a las niñas. Se afirma que las niñas tienen ocho veces menos contacto con los maestros que los niños.
- Los maestros y maestras a menudo reportan más gozo de enseñar a niños que a niñas.
- Las niñas tienen menores expectativas sobre sí mismas en la escuela y fuera de la escuela piensan que su futuro consiste primariamente en ser esposas y madres.
- Las bajas expectativas de las maestras y de las niñas son reforzadas por libros de texto, currículum y materiales de evaluación en los que no aparecen las figuras femeninas.
- Usualmente los niños tienen suficiente espacio para practicar ciertos deportes, mientras que a las niñas no se les ofrece el mismo espacio.
- Los premios y logros obtenidos por las niñas no se reportan ni divulgan tan profusamente como los obtenidos por los niños.
- Existe una clara tendencia a utilizar lenguaje sexista.
- Las niñas son víctimas de asaltos sexuales y hostigamiento por parte de maestros y compañeros.
- Las autoridades educativas a menudo no son conscientes de este tipo de ataques e incluso pueden mostrarse reacios a intervenir, especialmente si consideran que semejante conducta es "natural".
En el marco de desigualdad y discriminación estructural que se encuentra en la base de los procesos de socialización y construcción de los estereotipos de género en muchos sistemas educativos, también los niños y los adolescentes varones, se encuentran comúnmente condicionados o son incitados a comportamientos intolerantes o abiertamente violentos.
“Examinar la construcción de la masculinidad y el rol que ésta juega en el proceso de desarrollo no es entonces un simple ejercicio analítico, sino que tiene implicaciones útiles y urgentes para mejorar la calidad de vida en cada país y debería comprometer a los hombres en la gestión del cambio dirigido al establecimiento de una cultura de derechos humanos en la institución escolar.”(29)
Otra de las principales reivindicaciones de las organizaciones y organismos que defienden la equidad de género en las escuelas, es la urgente revisión de programas y manuales escolares desde una perspectiva de género, a fin de abandonar su sesgo androcéntrico e incluir también referencias de mujeres.
“La necesidad de profundizar en la realización de los derechos humanos de las niñas y las adolescentes en el ámbito escolar está produciendo nuevas tendencias pedagógicas que plantean la superación de las formas segregacionistas del currículum y apuestan a la construcción de un modelo en el que se integra la experiencia de hombres y mujeres, con un tratamiento equitativo que vaya más allá de los tradicionales presupuestos sobre el género. El aporte concreto que se espera de los maestros y maestras para este fin es una cuestión urgente.”(30)
Se muestra así necesario utilizar las “gafas de género” en la labor educativa, para entender y atender con perspectiva de género a los jóvenes hombres y mujeres que hacen del espacio escolar su segunda casa.
25. V. Muñoz Villalobos. “El derecho a la educación de las niñas. Informe del Relator Especial sobre el derecho a la educación”. E/CN.4/2006/45. Comisión de Derechos Humanos de la ONU
26.Se entiende por currículo oculto la “estructura que no es reconocida oficialmente por docentes, administrativos y estudiantes, pero que tiene un impacto significativo; por lo general está determinado por los valores, actitudes y conductas apropiadas” in http://www.monografias.com/trabajos17/curriculum-oculto-estrategia/curriculum-oculto-estrategia.shtml#tipos
27, 28, 29 y 30.V. Muñoz Villalobos. “El derecho a la educación de las niñas. Informe del Relator Especial sobre el derecho a la educación”. E/CN.4/2006/45. Comisión de Derechos Humanos de la ONU